sábado, 21 de noviembre de 2015

Vencedores vencidos (a mis amigos y amigas K, mi pronóstico electoral)



A mis amigxs militantes kirchneristas, aunque poco y nada les interese mi opinión, necesito decirles algo que escribí apenas pasada la elección donde Scioli superó a Macri por poca diferencia, y que ahora publico en este blog con mínimos retoques. Es algo así como el juego de las dos noticias, la buena y la mala. Primero va la mala:

A Macri lo criaron y lo alimentaron ustedes, amigos y amigas K. Lo crearon como alternativa electoral, como sparring político-mediático, pensando que siempre lo iban a tener de punto. Era y es el enemigo ideal, siempre que no crezca tanto. Les viene muy bien para sentirse ustedes "la patria" aunque militen para la Chevron expulsada de Ecuador, para soñarse ustedes mismxs "luchando contra las corporaciones", para hablar con impunidad de "la derecha" como si les fuera algo ajeno. Lo que ahora les molesta es que el tipo, tan parecido a Scioli, llegó hasta casi el 35 % y se instaló, Clarín mediante, en un triunfalismo hueco que vislumbra un triunfo, según mi parecer, inviable.

Y aquí la buena noticia: el producto Macri, esa coproducción de Durán Barba y toda la máquina propagandísti-K que lo posicionó como "el opositor", ha llegado probablemente a su techo electoral. No hay chances numéricas, a mi juicio, de que pueda ganar el balotaje. Mucha gente que le siente mal olor y/o que teme cimbronazos económicos votará, instintivamente, por Scioli. Y mucha gente con miedo, con un miedo atávico a "los 90" en los que, paradójicamente, Scioli y su gente hacían carrera en el neoliberalismo, también votará por Scioli. Con todo esto, con el aparato partidario-estatal del FPV en todo el país, con la ayudita de Duhalde, con la bendición de Francisco, con el voto-cagazo de una masa "progresista" y de muchos independientes, estimo y arriesgo que Scioli gana.

Por lo tanto, relájense, que con sufrimiento extra y el culo en la mano, ustedes "ganan" este domingo: ustedes finalmente van a poner a su impresentable Daniel, hombre de las trasnacionales chinas, de Monsanto, de Barrick, de Chevron y de tooodas las corporaciones mafiosas que ya gobiernan, en el sillón presidencial. No necesitan enojarse con quienes no queremos elegir entre el cáncer y el tumor, que de todos modos somos tres gatos locos a nivel electoral: un porcentaje absolutamente irrelevante (menor que los votos del FIT, por dar un ejemplo). Ya sé, admito que necesitan enojarse con otros -¡nunca con ustedes mismos!- para sentirse cómodxs librando una batalla platónica entre el bien y el mal, entre el amor y el odio, o, como admiten lxs que quieren tranquilizar sus conciencias, entre el "mal menor" y el mal a secas, ése que viene con globitos.

Sigan obedeciendo órdenes, que así llegamos a esto. Yo tampoco hubiera querido ver a Macri en la antesala de la presidencia (aunque perderá, arriesgo e insisto). Pero ante la cháchara de los "dos proyectos de país", yo no olvido que no hemos necesitado a Macri para ver a un carapintada como Berni comandando invasiones de gendarmes y policías a barrios pobres, como tampoco hemos necesitado a Macri para ver a un genocida al mando del Ejército. Yo no olvido que no hemos necesitado a Macri para ver a Monsanto en el gobierno, a través del agente-apenas-encubierto Lino Barañao, como tampoco hemos necesitado a Macri para ver a Barrick haciendo y deshaciendo en San Juan (más bien deshaciendo la cordillera) de la mano del futuro ministro, ya anunciado por Scioli, José Luis Gioja. Yo no olvido, en fin, que no hemos necesitado a Macri para ver cómo el Estado hacía desaparecer a Luciano Arruga durante años y finalmente miró para otro lado sin decir palabra (como lo hizo Scioli) cuando la lucha sacó a luz sus restos. Ni tampoco hemos necesitado a Macri para aprobar la "ley antiterrorista", pieza jurídica clave del libreto de la Embajada de EEUU y del G-20 para controlar a las resistencias populares. Yo no olvido que la derecha llegó hace rato: todo un Scioli, ya lo ves...

Ustedes, amigos y amigas K, van a ganar el balotaje, pero ya perdieron, porque han perdido la rebeldía (o en el mejor de los casos, la han postergado). El neoliberalismo ya está en sus venas, como el glifosato, el cianuro y otros venenos, incluidos el posibilismo y el conformismo. Todos ellos, aunque les cueste creerlo, tarde o temprano matan. Inexorablemente, matan.

Macri va a perder la elección, pero quedará bien plantado como una oposición "votable" y una alternativa electoral "sustentable"... ¡gracias a ustedes que lo hicieron posible! Ustedes le han hecho el juego siempre, y se lo siguen haciendo. Ustedes ganan elecciones y mantienen el poder, pero han perdido toda perspectiva de soberanía popular, de una política desde abajo hacia arriba, de una descolonización que urge como nunca. Ustedes festejan triunfos electorales abrazados con Insfrán, Manzur y Corpacci (esos Macris propios) pero han renunciado hace tiempo a resistir a las corporaciones, pretendiendo seducirlas como potenciales "inversores". Ustedes ganarán y festejarán este domingo, pero ya perdieron, y perdimos como país, porque el Council of the Americas está chocho con el nuevo presidente que aprobó su examen allí meses atrás. Eso es ganar, pero ganar en la ficción de una road movie donde todo es huir, consumir y tirar; en un sueño empetrolado y racista que los empuja a no cumplir ni siquiera con las buenas leyes que sancionaron para los pueblos originarios. Es la utopía reaccionaria del "desarrollo" capitalista en una colonia próspera (?) que es finca y cantera del mundo, silo del mundo, campo de experimentación química y hasta nuclear del mundo. Porque el capitalismo globalizado es implacable, acá y en la China, si lo sabrá Zannini.

En esta película que aún no termina, ustedes son, hasta el momento y para mi modesta mirada, lo que dice el título de la canción que nos gusta a todos y a todas, Vencedores vencidos. Y ahora resisto yo, porque me toca.

¡Buena suerte y... más que suerte! Sin alarma... me voy corriendo a ver qué escribe en mi pared la tribu de mi calle... 


PS 1: Mis respetos por el triunfo electoral del balotaje y, como dije siempre, el afecto de mi parte no cambia, aunque algunx me rotulará equivocadamente como un "anti" (faltaría más, soy anticapitalista y antifascista, mis dos únicos "antis"). Esto es apenas un intento de debate político desde alguien que tiene, simplemente, otra mirada, probablemente sesgada o parcial, y además ultraminoritaria. Espero encontrarnos en las resistencias contra el saqueo y el ajuste que ha de gestionar Scioli. Un abrazo a todos y todas. 

PS 2: Si este pronóstico fuere errado y el producto Macri llegare al gobierno por el voto popular, ustedes saben bien dónde y con quiénes voy a estar, como siempre: junto a mis hermanxs de las asambleas y organizaciones sociales que resisten (entre las cuales seguramente me abrazaré con muchxs de ustedes) en defensa de todos los derechos humanos, en defensa de la vida y los bienes comunes, contra las corporaciones.

1 comentario:

Daniel Antonio Jiménez dijo...

Hola, no entiendo bien eso de tener que perder todo para volver a empezar desde abajo, a tener que luchar por todo de nuevo. Yo creo en sumar, en discutir rumbos. No en negar lo que se gana por lo que se debe aún conseguir.
Tampoco entiendo eso de generalizar, de que todos los ka son un bloque y que obedecen ordenes sin más ni más.
Yo también milito por la ecología desde joven y no creo en la inocencia de la gente. Gente que en los 90 se engancho con el modelo megaminero, para algunos porque fueron engañados o por ingenuidad, por conseguir trabajo o parte de esa modernidad prometida, para mí porque todos elegimos y también somos cómplices de la realidad. Debieron pasar años para que muchos de ellos, desengañados del éxito del oro se convirtieran en luchadores socioambientales. Yo milito no sólo por la gente, también milito por las plantas y los animales en general, no creo que sólo unos pocos tengamos derechos y todo lo demás sean cosas para nuestro uso.
Y aunque vote a Scioli no soy Ka. Así como lo vote a Palito, porque consideraba que hay males menores que nos ayudan a seguir. Coincidimos en algunas cosas, seguro que por ellas seguiremos luchando, pero desde hoy probablemente sea de nuevo desde más abajo, con más frentes abiertos. Saludos
Daniel Jimenez