El FIT en Atlanta y los sujetos invisibles: Cuando el árbol de las luchas impide ver la lucha por el bosque

SUJETOS Y PREDICADOS: UN ANÁLISIS (SIN)TÁCTICO Y ESTRATÉGICO

-- Leo en La Izquierda Diario (interesante órgano de prensa del PTS) a propósito del próximo acto en Atlanta: "La juventud, los trabajadores, las mujeres, el colectivo LGTB, los pueblos originarios, todos los oprimidos y explotados del mundo tenemos la fuerza para vencer".

-- Leo en el portal de Izquierda Socialista la nota titulada "Las razones para venir al acto del FIT". Se habla de "luchar por una salida de fondo".

-- Veo y escucho un spot del Partido Obrero: proponen "una alternativa política de los trabajadores" ante el ajuste de Macri y los partidos llamados opositores.

Nada podría yo objetar a lo que unos y otros predican de buena fe, excepto que mis reservas me llevan a preguntar: ¿cuál "alternativa política", cuál "salida de fondo"? Y en el muestrario de "sujetos" de las luchas, de "oprimidos y explotados"... ¿dónde están tantas luchas que vos y yo sabemos, pero que la izquierda no toma en cuenta?

NO SOS VOS. SON TUS PARADIGMAS.

Mi punto es el siguiente:

La izquierda reunida en el FIT sigue sin entender (o sin recordar) quiénes lograron prohibir la megaminería y el fracking en varios municipios del país, quiénes lograron un histórico juicio contra la fumigación en Córdoba, quiénes echaron a Monsanto de esa provincia, quiénes obligaron a la insensible Corte Suprema de la Nación a fallar en favor de los vecinos y vecinas de Andalgalá contra la minera. La izquierda parece no recordar quiénes conquistaron y defendieron leyes como la 7722 en Mendoza, quiénes defienden el cerro Famatina en La Rioja y el río Juramento en Salta; quiénes lograron que al menos una vez hubiera verdadera democracia en la Patagonia, con el masivo "No a la mina" en los plebiscitos de Esquel y Loncopué. La izquierda parece no saber quiénes defienden los ríos libres de represas inundadoras en el litoral, quiénes cuidan los humedales y los glaciares, quiénes resisten los desmontes, la sojización, la invasión de countries... quiénes eligen cuidar sus lagos o sus bosques en vez de las "inversiones extranjeras"; quiénes se le plantan al Rally Dakar en la Puna... y podríamos seguir. ¡Ah! Tampoco recuerda la izquierda, según parece, quiénes sufrieron no sólo represiones policiales y judicialización a mansalva (incluido el "estreno" de la ley antiterrorista de Cristina Fernández), sino también aprietes, golpizas y matonajes de la UOCRA, la AOMA y otros sindicatos mafiosos en Catamarca, Córdoba o San Juan (para muestra, bastan estos "botones").

¿Por qué me pongo tan descriptivo y aparentemente quisquilloso? Porque -arriesgo una opinión- yo creo que la izquierda, en general, sigue atada dogmáticamente a la añoranza de "sujetos sociales" de manual, sin reconocer la incómoda emergencia de "sujetos" inesperados, imprevistos, inasibles, incorrectos e inconquistables para un "marxismo" embalsamado*. Las asambleas, los "vecinos autoconvocados", los grupos de defensa territorial o socioambiental son demasiado "inorgánicos", demasiado "centristas", demasiado "horizontales" para los paradigmas de esta izquierda. No digo que las asambleas, autoconvocados, etc. sean garantía de triunfo (de hecho, suelen -solemos- ser inconsecuentes o intermitentes). Lo que digo es que una izquierda combativa, pero en el fondo despolitizada (que no termina de leer los procesos vivos como este "ecologismo de los pobres"** porque tampoco entiende la centralidad de la lucha civilizatoria ante el holocausto ambiental*** del capitalismo), una izquierda así, me temo, podría ser garantía de que el extractivismo y la devastación climática nos lleven puestxs a todxs, mientras luchamos por aumentos de salarios y por trabajo en blanco. ¿Me explico?

Mis mejores deseos para el acto de Atlanta, pero sobre todo mis deseos de que nos abramos a debatir en serio. No sólo para que el árbol no nos impida ver el bosque, sino para escuchar y aprender de todas las voces del bosque, y especialmente de sus cuidadores. Eso sí: habrá que hacerlo pronto, antes de quedarnos sin el único bosque que tenemos.

* Hay excepciones, desde ya, a lo que afirmo. Sin embargo, creo estar describiendo conductas (y discursos y prédicas) que son la regla.

** La expresión es del catalán Joan Martínez Alier.

*** Ver en este mismo blog: Transgénicos, ¿sí o no? Un debate con el PO y el Frente de Izquierda: tecnología y maldesarrollo.